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Puedes perder tu propósito

· Cristianismo,Liderazgo,Espiritualidad,Reflexiones,Fe

Todos de alguna forma hemos pasado por momentos difíciles en nuestras vidas, que de una u otra manera nos han marcado, todas estas situaciones de angustia han ido formando nuestro carácter y personalidad, sin dejar al lado los momentos de alegría que también son parte de lo que hoy somos, las circunstancias buenas y no tan buenas igual nos forman.

Muchos pensamos que el resultado de lo que hay en nuestro alrededor es lo único que existe para nosotros, sin embargo no es así, hay una vida verdaderamente abundante para usted y para mí, donde al caminar en legalidad veremos grandes bendiciones, dando como resultado un corazón sano, que permitirá cada segundo ver, respirar y percibir la paz de Dios en cada momento.

Las herramientas para ser bendecidos ya fueron puestas delante de nosotros, cuando el favor de Dios está en nuestros días en todo lo que emprendemos es porque ya han sido puestas en práctica, estas son la obediencia y la humildad. Estas herramientas son vitales para vivir abundantemente.

Pensemos en esto…La naturaleza de Dios es siempre dar, crear, hacer crecer, etc. sin embargo hay un texto en la biblia (Santiago 4:6) que menciona la resistencia de estas cosas por parte de nuestro Creador, y ¿cómo es que resiste siendo Él Dios?, es porque se niega así mismo a bendecirnos cuando existe la desobediencia y orgullo en el corazón, siendo como resultado contrario una vida llena de gracia cuando se es obediente y humilde.

Cada ser humano nace con un propósito, hay algo especial por el cual fuimos creados, hay algo determinante del por que existimos hoy, no es casualidad el tiempo en que nacimos. Pero muchos serán como Sansón, que por ser desobedientes no alcanzaron la plenitud en sus vidas. Harán algo con su propósito, sin embargo nunca conocerán la grandeza de Dios en todo lo que hacen, y serán recordados pero no por su victoria, sino por su fracaso.

Sea obediente, descanse y confíe, hay una vida plena que el Señor quiere que vivamos, no tiene sentido vivir sin su favor y gracia en cada paso que damos.

Siempre hay algo mejor para nosotros, otro aire para respirar, se alcanza cuando caminamos y damos fruto en nuestro tiempo.

“Pero él da mayor gracia. Por eso dice: Dios resiste a los soberbios pero da gracia a los humildes.” Santiago 4:6

“Será como árbol plantado junto a corrientes de aguas, Que da su fruto en su tiempo, Y su hoja no cae; Y todo lo que hace, prosperará.” Salmo 1:3

- Carlos Castillo Aguilar